quinta-feira, 12 de agosto de 2010

78 - ZAZEN

Estudiar Zen
es estudiar a sí mismo.
Estudiar a sí mismo
es olvidarse de sí mismo.
Olvidarse de sí mismo
es ser UNO con todas las cosas.

DOGEN – Siglo XII

Estuve haciendo Zazen (retiro intensivo, con inclusión de prácticas de “meditación Zen”) durante cuatro días en el Monasterio.
El texto arriba, es de un cartel en medio de los árboles que rodean el Monasterio y me parece que él expresa la “finalidad” más profunda (y que me perdonen los “puristas” zen por el término “finalidad” que usé) de las prácticas zen: el día en que cada ser humano del Planeta lleguemos a esa “meta” en mira, acabarán las confusiones en el mundo… el Cerebro Global será una realidad, con cada ser humano desempeñando la función de una neurona dentro del mismo… El caos planetario actual acabará y el Planeta será redimido, desempeñando la función de una “flor de loto” del Jardín Estelar
Mientras esa hora no llega, los monjes van desarrollando sus funciones a favor de la evolución del Planeta… Además de las “prácticas Zen” (que buscan el “vaciamiento” del ego manipulador y centrípeta, lo cual yo conocía de otros retiros que hice en otro monasterio semejante hace muchos años atrás) estos monjes realizan un gran trabajo “externo”, para ayudar en la Evolución del “mundo” que les rodea: no solo están envueltos con la recuperación del “medio ambiente” de los alrededores, como organizan esos “Retiros Zen” para ayudar en la evolución del “material humano” que se siente atraído por sus “prácticas contemplativas”…
Hasta seguidores de otras religiones (incluso padres católicos ya estuvieron por allí haciendo “retiros”) buscan el Monasterio…
Recientemente los Directores de la Policía de Brasilia les buscaron para “reciclar” sus agentes, por ellos recibir muchas reclamaciones de la población de la Capital de Brasil, en el sentido de aquéllos “agentes del orden” ser “muy violentos” en el trato con la población civil… Parece que aquéllos directores quieren que sus agentes den buenos ejemplos a la población en vez de apenas “palazos”…
Elites conscientes de su papel de “ser ejemplo” para las camadas inferiores de la sociedad, hacen esos “retiros” por allí, para desempeñar mejor su “papel ejemplar”…
En lo que se refiere a las “prácticas” en sí, no es fácil aguantar la disciplina y las “técnicas quietistas” (estas que incluyen una buena dosis de “auto-tortura”) para poder entrar en aquél estado de “plena atención en el aquí y ahora”…
En fin, quedé contento por haber pasado esos días en el Monasterio… Ahora quedé con una imagen mejor sobre las “formas de acción” que son usadas por allí, que la “vieja imagen” que tenía de ellos, de los tiempos en que llegué a acompañarlos esporádicamente dos o tres décadas atrás… En aquéllos tiempos me parecieron muy cerrados en sí mismos y hasta “impenetrables”… Ahora se les puede ver que están cada vez se abriendo más al “mundo alrededor”… Haciendo “imagen paralela” con una flor, con Dogen el Zen era “simiente”, tres décadas atrás cuando los conocí eran “capullo” y ahora ya están “abiertos en flor”… ¡Seguramente, para el bien de la Humanidad!...
Ibiraçú – 29 / VII / 2000.

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